Misuri, Estados Unidos / Redacción:
La noche de este martes está previsto que sea ejecutada la primera mujer transexual en Estados Unidos, si esto no es evitado por el Gobernador del Estado de Misuri, el republicano Mike Parsons.
Amber McLaughlin ha sido condenada aún como Scott McLaughlin por la violación y asesinato de una mujer, Beverly Guenther, ocurrido en 2003.
Sin embargo, ha solicitado formalmente clemencia al Gobernador, argumentando que sufre daños cerebrales y un trauma infantil.
Si Parsons no interviene, McLaughlin será ejecutada por inyección letal, así lo reveló la cadena CNN.
«La investigación ha reconocido el arrepentimiento sincero de McLaughlin y también lo han hecho todos y cada uno de los expertos que la han evaluado en los años que han pasado desde el juicio», destaca la petición al Gobernador.
McLaughlin ha sido «sólidamente diagnosticado con discapacidad intelectual limítrofe» y ha sido «diagnosticado universalmente con daño cerebral, así como síndrome de alcohol fetal».
El Centro de Información sobre la Pena de Muerte, contrario a la pena capital, resaltó que McLaughlin «es la primera persona trans a la que se le ha asignado fecha de ejecución en Estados Unidos».
También hizo mención a que el jurado no aprobó la pena de muerte por unanimidad, circunstancia que sí es necesaria en la gran mayoría de estados que ejecutan a reos.
«La ley de Misuri considera que un jurado no unánime es un jurado bloqueado, por lo que se recurrió a una norma que permite al juez imponer una sentencia por su cuenta», señalan, al tiempo que recuerdan que «el juez se basó en circunstancias agravantes rechazadas por el jurado para condenar a muerte a McLaughlin».
Cabe resaltar que numerosas personalidades políticas y de la sociedad civil han pedido que se anule la ejecución de McLaughlin, quien fue abandonada por su madre, agredida recurrentemente por su padre adoptivo y protagonista de «múltiples intentos de suicidio».
Finalmente, la sentenciada no ha iniciado ningún proceso legal para cambiar su nombre o comenzar un tránsito físico, por lo que permanece en el Centro Correccional de Potosi, cerca de St. Louis, un centro para varones.