Lima, Perú / Redacción:
En Perú, al menos 716 lobos marinos han muerto por la gripe aviar, una propagación de la influenza altamente patógena que ha provocado el deceso de millones de aves en todo el mundo.
Cabe recordar que las autoridades peruanas reportaron en noviembre el primer caso de la influenza viral en aves del norte del país.
De acuerdo con datos del Servicio forestal y fauna y del control de Áreas Protegidas, desde entonces han sido sacrificadas 63 mil aves, principalmente pelícanos.
«Hemos registrado también desde la mitad de enero la muerte inusual también de muchos lobos marinos, hasta la fecha tenemos cerca de 716 lobos marinos muertos en siete áreas naturales protegidas de la costa», detalló Roberto Gutiérrez, jefe de vigilancia del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas.
Desde inicios del 2021, el virus ha aislado a todo el mundo, provocando la muerte de más de 200 millones de aves debido a la enfermedad o a los sacrificios en masa, de acuerdo con la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA).
La influenza aviar también ha brotado y encendido las alarmas en Ecuador, Bolivia y recientemente en Argentina, Paraguay y Chile. Sin embargo, en Brasil, el mayor exportador de pollo del mundo, aún no hay casos confirmados.
Mientras que en Chile, las autoridades sanitarias detectaron la semana pasada el primer caso positivo de influenza aviar en un mamífero marino, en una playa en el norte del país.
Dichos ejemplares, que llegar a pesar cientos de kilos y medir hasta dos metros, nadan en las frías aguas costeras del Océano Pacífico y el Atlántico, y sus colonias pueden encontrarse en casi todo el litoral peruano.
Oceana, una organización internacional dedicada exclusivamente a proteger los océanos del mundo, reveló que la población de lobos marinos registró el 2020 unos 110 mil en Perú, principalmente en la región costera de Ica y la reserva natural de Paracas.
Además, en las últimas semanas, cuadrillas del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR) en Perú, portando trajes de plástico, guantes y mascarillas, han recogido y enterrado a cientos de lobos marinos de varias playas de la costa central de Perú. Incuso, el personal ha llegado en el momento en que los animales agonizaban.
«Lo que empezó con pelícanos el año pasado, recordemos, ahora les está saliendo a estos mamíferos marinos», indicó Javier Jara, médico veterinario del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR) en Perú.
Finalmente, cabe hacer mención que las autoridades peruanas en noviembre declararon alerta epidemiológica y sanitaria en el país por la influenza aviar, que hasta ahora no tiene cura, e impuso diversas medidas, una de ellas es que las aves sacrificadas sean enterradas con un mínimo de dos metros de profundidad.